Como dijo el abuelo Groucho: "Partiendo de la nada llegaremos a las más altas cimas de la miseria". También recogido por el general Custer: "De victoria en victoria hasta la derrota final"







domingo, 21 de octubre de 2018

8.000 KILOMETROS



A ver, desde el 31 de diciembre en Candás, San Silvestre (llovía si dios tenía agua) hasta hoy, que casi he acabado la temporada, he hecho 8.000 kilómetros. 8.015, para que el diablo no se ría de la mentira. Y el finde que viene igual salgo (ya sin presión, ya sin cuentakilómetros) a estirar el body con el GC Buenavista... o no.  700 kilómetros más que el año pasado. 

Una salvajada.

 Asusta pensar lo que hubiera podido conseguir si no hubiese tenido que parar en julio por las oposiciones.

Y he amado cada uno de esos kilómetros, he disfrutado como un verderón todos y cada uno de ellos, nunca he maldecido ni un solo minuto por dura que fuera la subida (Bueno... a veces bajaba un tres de santos jurando en arameo). Sólo, acompañado, en Gijón, en Langreo, en el Tour, en Bilbao, por lo civil o por lo criminal, con el Grupo Ciclista Buenavista (protagonista indiscutible de mi hazaña), con mi camarilla, con Juan Miguel, con el inmarcesible (señora... que no se le puede poner marco) MIchael T. Brown (la ayuda que recibí de Michael sería para escribir un disco duro entero), con barro, con frío, con solo (lo justito), con la Calurosa V roja y blanca, con la Calurosa VI azul (aluminio, más pesada, pero igual de fiable), con el desarrollo x32 que estrené esta temporada (el arma secreta), con el aliento de mis chavales del insti, dedicando etapas a Elena, al la madre de Fran, a Fernando Yarto, a Delia, a tantos ausentes...

- Los Lagos ayer, ya van siete subidas. 

Y va por vosotros, ahora que soy influencer y aparte del blog tengo cuatro grupos activos, por mis recién recuperados filologos, por mis exalumnos de Villaviciosa que tanto me han enseñado de la vida, por los Olarís, que en el fondo saben que no pueden vivir sin este blog y lo esperan "como el pasto al rocío" (Toma Neruda). Mi grupo personal y su presidenta vitalicia, Nuria Fernández. Y el Farrapona Team, ahí va la alineación de memoria: Conchi y su José María, Jesús Martinez Padilla, Ireneo, José Manuel Presa, Juan Miguel, Eloy quesepusomalínayerynopudoveniraloslagos, Nando Teverga, y los fabulosos hermanos Javi y Chema, verdaderos guardianes custodios de esta camarilla (Javi y Chema nunca aceptan un "no" por respuesta. Si se les mete algo en la cabeza, échate a temblar) con los que en cinco semanas hemos hecho un verdadero repoker de ases: El Fitu, Farrapona, Cobertoria, Cotobello y Los Lagos. 


Y va por mi madre y  Marina, mis verdadera inspiración y que siempre me dicen "Ten cuidado" (por supuesto, mi madre siempre remata con "lleva una chaquetina").

Ahora se acabó la temporada. Descansar, comer, no agobiarse, engordar un poquito (Hoy vi un perru de 55 kilos. Uno más que yo), limpiar las bicis (Tienen mas m... que la bombilla de una cuadra)y engrasar, cabruñar cada poco. 

Y hasta el 31 de diciembre de 2018.

lunes, 8 de octubre de 2018

LA COBERTORIA... POR FIN

- Carbajo, cagonros, ¿tas ahí?
- Yo vilu rodar por ahí abajo... 

Táctica empleada: Fueu a la Carrucha (recomendada por nuestro personal trainer, Adrián Martínez, desde Dusselforf. Que te parez...) Variante táctica: No hay pacto que no se cumpla ni deuda que no se pague

Tenía un pacto conmigo el Alto de la Cobertoria, una deuda sin pagar desde hace mucho tiempo, desde que hace diez años empezó a convertirse en mi kriptonita, en una mancha en mi historial ciclista, mi Annual particular, lo de Cuba, Alfa y Omega...

Anglirus y Morrederos aparte, La Cobi era la única muesca que faltaba en el manillar de la Calurosa, el único puerto que me había descabalgado dos veces, tres si contamos un intento fallido por culpa del asma. Hace diez años fui con el V Regimiento de Beduinos, maricón el último y sálvese quien pueda, una mala experiencia personal. El año pasado, con mi mentor Juan Miguez Muñoz Alguacil (que fue concejal), rompí miserablemente. Así que la Cobi ya me debia dos. 

- Falten los Pata Negra, que como estaben folgaos, tiraronse al Gamoniteiro. Nando, Conhi, José María, unodenegroquesenosjuntóynosécomosellama, Eloy, el menda, Ireneo, Michaly Presa.

Pero el sábado se juntaron todos los planetas en una alineación que sólo se repite cada tres mil años, las piezas empiezan a encajar. Para empezar, cambié el piñon x28 por x32,  el Panda por un Ferrari. El Team Cobertoria es una máquina bien engrasada, digna de la falange de Filipo, los Tercios de Flandes, el Regimiento Alcántara. el Séptimo de Caballería de Cust  (no, esi no, esi no...) y hasta tenemos a Michael Brown más chulo que el Duque de Güelinton. Si quitamos una pieza todo terreno como Goyo, aparece el Barreiros Diesel de Xuan. Buen rollito, paz, amor, y Canal Plus en el salón. Hasta estamos demostrando que es posible hacer ciclismo sin elearnos entre nosotros. ¿Team Ferrari? Fernando Alonso, calquín, que yes un calquín... Y la temporada empieza a dar resultados, el entrenamiento, por qué no decirlo, hasta la planificación: este mes cayeron el Fito, la Farrapona, antes Tarna. Algo estaremos haciendo bien. 

- ¿Y cuando decía Carbajo que igual subía hasta el Gamoniteiru?
- Calla, calla...

Y eso que sólo mencionar la Cobertoria provoca una relajación en el esfinter que hay que controlar. No hay cuartel, la Cobi no toma prisioneros, no quarter given. Cuando ves una señal de tráfico a lo lejos, es que el nivel supera el 10%, cuando lees "13%, 14%" te preguntas qué necesidad tienes de esto, cuando no ves ninguna señal es que estás por debajo del 10% descansando... al 8% o al 9%. Cuando un compañero te pasa vacilando y te dice que "solo" estamos al 12% deseas que se le salga la cadena; y cuando te pasa un chavalote que no era de la partida esprintando, deseas que le hayan puesto algo raro en el bidón y le entre una gastroenteritis. Cuando miras hacia arriba (cuando puedes mirar hacia arriba) y ves curvas imposibles ahí arribones piensas "porfa, por ahí no"; y sí, es por ahí, y aunque la superficie es excelente, te da la impresión de que una mano cruel te agarra la rueda. La de atrás, por supuesto. La mano que aprieta. 

- Descendió a los infiernos, y al tercer día...

Pero subes, no puedes fallar, llevas tres meses pensando este día, los has marcado con rojo, has calculado los días que llevas trabajando, lo que te queda de temporada, los kilómetros que te faltan para colgar la bici, sueltas la rabia que te ha llevado hasta Pola de Lena. Ahora o nunca, now or never, por lo Civil o por lo Criminal o por el Juzgado. Y aunque suene a blasfemia, no sufres, no sufres más de la cuenta, lo esperado, Regalado murió ayer. Sufre José María con sus casi cien kilos, eso es mérito. Pero tienes tantos kilómetros encima que, aunque parezca raro, no haces la culebra. Hasta te permites esprintar en el último kilómetro (¡¡llano como la pista del aeropuerto, os lo juro por la cobertura de mi móvil!!) para coger a los rezagados. 

-154 kilos de ciclista, me los dividen ustedes como quieran...

Arriba frío, empieza a cambiar el tiempo, llegan las primeras nubes preñadas de agua, la ropa que llevamos es ni si, ni no, sino todo lo contrario, ni verano ni invierno, ni jota ni fandango. Así que tras las fotos y las tonterías de rigor, bajamos por el Cuchu Puercu al Cordal. El Cuchu es un eslabón entre ambos puertos, apenas dos kilómetros, alguna cuesta puñetera,  el firme es una mezcla entre la M-30 en obras y el soterramiento de FEVE en Langreo, hay más baches que firme, bajamos haciendo slalom de eskí. El nombre es adecuado, un puerto cuartelero con una vista impresionante sobre el centro de Asturias, pero no puedes disfrutarla pensando que vas a caer en un socavón o que en cualquier momento te van a pegar un tiro los cazadores, o te va a salir un jábalí, o un llobu, o un oso polar.

Y ahora una reflexión. Ahora que cayeron Cobertoria, Colladiella, Lagos, Tarna, y que quedan pocos dias de temporada, ¿que objetivos me quedan?

Ojo al cristo, que es de plata y se rompe...