Memorial Manuel Alvarez Díaz

Adjuntovos el programa del Memorial de esti añu, por si vos apetez alguna conferencia; recomiéndovos la de Salva Calvo.

Sociedad de Festejos y Cultura “Santiago Apóstol”
XI MEMORIAL “MANUEL ALVAREZ DÍAZ” 2010
Programa


15 de marzo- Presentación oficial.
Salón de actos CAJASTUR.

16 de marzo- “Carreras de montaña por todo el mundo”
Salvador Calvo Redondo
Cine “Felgueroso”

19 de marzo -à“El Trou de Fer: Un día fue un sueño”
Jorge Núñez Rodríguez. Descenso de barrancos.
Lugar:

20 de Marzo- “Equipo nacional militar de patrullas de 100 kilómetros”.
Teniente Coronel Jorge García de Castro González
Regimiento “Príncipe” nº 3
Salón de actos CAJASTUR.

21 de marzo - “El Pozo Azul en Burgos”.
Jesús Fernando Manteca Fraile. Espeleólogo.
Lugar:

22 de marzo- “Aconcagua, más que un record” (Jorge Egocheaga)
Andrés de la Torre Martínez.
Cine “Felgueroso”

23 de Marzo- “El McKinley sin barreras”
Miguel Angel Gavilán López (“Montañeros sin barreras”)
Comandante Fernando Yarto Nebreda (GMAM de Jaca
Cine “Felgueroso”

Todas las sesiones a las 20:00 h.

La Colladona

- Esti Carbajo ta como un perru caza...
Toma Colladona...

77,5 km, 3h 57, max 167, avg 145, 2139 kcal

A quien se i ocurre, resulta que a penas subí la venta del Carmen, llegué medio muertu a Moreda... y empéñome en volver por la Colladona. Tien razón Veli el secretariu, hay que ser bartolo pa facer estes tonteríes.

Ya empecé mal subiendo el Carmen, paecía que taba subiendo el Angliru: pulsaciones a dos mil, velocidad 7,5, ganes de marchar pa casa, la moral por los suelos por culpa de la rodilla... Menos mal que el desnivel no pasa del 4% y de que en Mieres estaba too el equipo esperándome, gracies, chavales. Entre un par de semáforos y un furgonteu que taba atravesau, aguanté al grupo hasta Moreda; pero ya se sabe que en tierres alleranes yo no rindo, el alleranu ye el depredador míu por excelencia (un día contarevos cuando fuimos a jugar a fútbol sala a Misiegos: tirábennos de too desde les ventanes; ¡la muyer de David Villa casi no sale de allí viva, con les osties que daba en defensa!). Pero bueno, a mi bola llegué hasta Cabañaquinta recuperando poco a poco; y una vez que dí con el grupo, no se me ocurre más que tirame pa la Colladona (cara difícil), debe ser que ya estaba from lost to the river (¡sorry, Mike!), porque no se i ocurre ni al que asó la manteca.

Pero bueno, poco a poco, con la moral recuperada, calorín... y p'arriba. Montero 79, que tien un blog muy buenu, destaca que la Colladona no da descansos. El mayor problema en si no fue la subida, sino poneme a subir con ropa de invierno: camiseta corta-camiseta larga- maillot y chubasqueru, guantes y pantalón de invierno. Total, que sudé como un pitín, el cascu si lu retorcía daba pa llenar un calderu. Haz quince días les manes quedaben congelaes; hoy casi reventaben de calor. Velocidad: 8,5 km/h, 7,6, 6,8... como si hubiera pisao un chicle. Al final, como no tenía más remediu que coronar, eché el restu y... hasta arriba. Corolario, pa bajar casi muero de frío cuando empezó a secar el sudor, pa no decir lo malo que tá la carretera. Y sin más, pa casa.

Bueno, sin más... Como tenía que facer kilómetros pa lo de Bilbao, tovía tiré hasta San Pedro.

Vuelta la burra al trigo

Uno de la Cuenca, en Praga, que se note...

82 km, 4h 4m, max 217 (?), avg 136, 1962 kcal

(Esti castrón pulsómetro ahora funciona, pero se conoz que acopló con el de Celedonio)

Vale ya de viajar, que en casa como en ningún sitiu (bueno, tampoco ye así...). Así que deshacer un poco la maleta... y a rodar, a ver como tábamos de forma. Presta ver que subieron les temperatures, ya empieza a dar el solín. Hoy tratábase de ver como tamos después de una semana de dormir poco y comer mal (¡venga bocadillos en los aeropuertos!). Así que eché a rodar un poco por la pista, hasta que encontré a Celedonio y echamos p'a Olloniego y luego p'al polígono, que yo no lu conocía bien del too, y sobre todo está soleyero. Y entre ponte bien y tate quietu, sube y viaja y da la vuelta, cuatro horines, eso si, sin subir cuestes, y con la rodilla como un bote cuando llegué a casa. Hoy toca tomar el sol, rodar suave con piñones grande un par de hores, y a disfrutar, que tampoco hay que escornase encima la bici.

¡Calamita!

"Profe, el próximu viaje... ¿podemos hacelu a Punta Cana?"

"A ver si encuentro la oficina de reclamaciones..."

No todo va a ser ciclismo (o como decía Krahe, no todo va a ser follar), un poco de viaje por el mundo mundial.

Pues señor, salimos de Praga con "un poco" de nieve, por delante cinco horas de tren. Y cuanto más ibamos pa Eslovaquia, más nieve. Y todo iba muy bien. Hasta que a les cuatro hores llegó la revisora y no sé qué nos dijo, por que no hablaba inglés, algo como que teníamos que cambiar de tren. Así que en un pueblu cerca de la frontera hicieronos bajar del tren. Y que fueramos p'al autobus, pero... no había autobús. A too esto, les cuatro de la tarde, tapeciendo...

La estación parecía venir de eses películes de Drácula, llena de gente a cual más desesperá. Casi nadie hablaba inglés. Fuimos a la taquilleira, y la probe echonos una retafila de la que sólo entendimos una palabra: "¡Calamita!". Allá apareció un puntu que hablaba un español más que decente, y que nos dijo que aquello no iba p'alante. Y a too esto venga a nevar, sin taxis, sin hoteles, y a reclamar al maestro armero...

A la hora sacaronnos pa un autobús. El autobús estaba allí, pero solo faltaba un detalle: el conductor. A la hora apareció otru autobús, esti sí con conductor. Pero cuando ya estábamos toos subíos, llegó un policía. Otra retafila... y p'abaxo. A too esto aparecieron como por ensalmo les profesores polaques, que hablaben la llingua de allí, y explicaronnos la jugada: frontera cerrada, vuelta p'atrás y a coger otra línea de tren. Claro, esti tren tenía que dejar pasu a too lo que estaba programao. A eso de les diez estuvimos paraos una hora. Al llegar a fin del tren, otra hora en taxi hasta la pensión, con una nevada de cojones, a eso ya de les doce la noche. Bram Stoker hubiera estao orgullosu del viaje. Menos mal que los chavales no me dieron ninguna guerra y que el compañeru Andrés ayudó como un campeón (y menos mal que aparecieron les polaques, porque si no tovía estamos allí...)

Santa Cristina de Lena

3h 57', 75 km

Hoy tocaba esta joya del prerrománico asturiano; yo pensé que los colegas se lo tomaríen con calma pa ver la civilización, el arte, la cultura, la belleza... ¡Osties! Y ye que como decía Maki Navaja, "en un mundo podrío y sin ideales, a les persones con sensibilidad sólo nos queda el recurso a la estética". Pero ay amigo, la estética, aunque pueda mover al mundo, no mueve pedales...

Salí de casa a les 10:20 pa calentar un poco; a les 10:21 ya taba pensando en volver, joder qué frío; la mano derecha ya taba desaparecía, la izquierda aguantaba... (por favor, no ver aquí intenciones polítiques); pero como los ciclistas somos igual que la carne de sapu, tiré pal club.

Primer hachazu, san Tirso, menos mal que esperaron abajo y aguanté hasta Pola de Lena (¿En asturiano de academia no debería ser "Polla Llena?), segundu hachazu; y yo pensé que estos cabrones taríen visitando la iglesia; pero lo que taben visitando yera una cuesta que hay más arriba que no está nada mal. Tiré p'arriba a ver si los garraba y efectivamente, cuando yo taba acabando la cuesta empezaron a bajar; a mí quedome una cara como la del capitán Scott cuando vió la bandera noruega en el Polo Sur.

Así que nada, vuelta solu pa mieres con les poques fuerces que quedaben, menos mal que a mediu San Tirso vino Michael a rescatame, se ve que los españoles teníen mucha prisa, manda cojones...

Y nada, la semana que vien, a pasar frío a Checoslovaquia, menos mal que el mi primu el gaiteru ya me prestó los calzoncillos. La semana que vien no toy aquí, pero acordaivos: nun vais poder conmigo, cabrones. El raposu ataca por debajo la butaca...

Pa Nava

3º45, 75 km.

Y elcima, el castrón podómetro no funciona, jodida pila.

Ayer, después del temporal del finde anterior, la gente tenía gana de tirar de gatillo. Primero calenté un poco (ye un decir) en la pista de la señorita Pepis antes de dir pal club. Unos 15 toreros en la salida, de diferente pelaje y condición (no hablemos del certificao de penales, por si acasu). Y pa Nava, pero no precisamente a tomar sidra. De frío, ya, ni hablamos: en La Nava ya tábamos sudando como perros.

Hombre, yo toy muy contentu porque subí la Gargantá con el grupetto (ellos xiblando, yo con la llingua fuera), pero aguantelos; y llegué con ellos a la Pola, mientras seguien de calentamientu; pero amigo, en la recta de Collau, se acabó el carbón: zapatazu, golpe de riñón y ahí quedó el Coyotín solu, pese a los esfuerzos de Jorge y Oscar. Pa cuando llegué a Nava, ya estaben arrancando. Salí de Nava con Jorge y pensé: "Qué bien, dejé a Jorge colgau"; pero ay amigo, Jorge taba tomando les chocolatines mágiques y... que si quies arroz, toa la vuela solu, dónde vi yo esa película...

Como me quedaba un poco de orgullo, decidí volver por Valdesoto y Carbayín, así que el 12% no veas que gracia me fizo; pero bueno, llegué a casa enteru y verdaderu. Lo peor ye que debaxo casa tengo un chigre, y no veas qué cara te ponen los que tan fumando fuera: El primer comentario amistosu ye, "¿de donde vendrá esti gilipollas?". El segundu ye: "Con lo bien que se tá aquí, calentín y con unes botellines de sidra y unos caldinos". Y lo peor ye que a veces creo que tienen razón...

hay gente pa tóo...

El Guerra entró una vez a un bar y dijo: "Parte jamón, que soy ricu"

3º09, 62 km, max 161, avg 135, 1508 kcal

Vien la frase a que una vez, a Rafael Guerra presentaron-i un señor muy famosu y muy ricu, y entós el Guerra preguntoi a qué se dedicaba, y el fulanu dijo que yera guinecólogu obstetricista, y explicoi lo que hacía; y entós fue cuando el Guerra soltó su famosa frase: "Hay gente pa tóo".

Bueno, pues hubo xente que hoy, con lo que taba cayendo de frío, xuntámnonos pa salir en bici. En Frieres yo taba tou contentu porque taba empezando a nevar y más de un no sentía les manes; entós yo dixe pa mí que a ver si algún se animaba y volvíamos pa casa; pero qué va, estos ciclistas son muy necios, así que p'alante. Lo de les manes ya os habrá pasao, ye horrible; primero no sientes el meñique, luego olvidate del anular... Más de un daba palmes como si fuera primu de el Lebrijano.

Pero ay hermanu, en subiendo Tudela Veguín empezamos a calentar y a sudar, que con tantes capes de ropa paecíamos cebolles. Lo de subir Veguín ye un decir. En cuanto pegaron un tirón, adivinai quién quedó atrás. Menos mal que en el calderu (en San esteban de les Cruces, chaval, que paeces nuevu; cómo se nota que nunca fuisti por ahí en Carbonero).

Una vez que cruzamos Oviedo sin atropellar a nadie, otru latigazu en Colloto, y ahí quedó el Coyotin solu. Pali, pali, llegué al pié de Gargantá y ahí me recogieron Michael e Isidro, y subimos contando los típicos chistes de "un inglés, un francés y un español". Pero mientras yo subía a 159 kcal, ellos diben a 120-125.

En Gargantá hicimosi un homenaje a Pepe Marquesina (prubín, ahora que tá lesionau; saludos, Pepe, y pronta vuelta al pedal); como había mediu rayu de sol, quedamos allí charrando un ratu. Pero como había que bajar, cada uno tiró pa donde pudo. Michael tovía debe tar muertu de frío esperando por Fernando, que taba vacilando de que quería dir pa Mieres. Yo por mi parte fui hasta el tallerón de Duro un par de veces pa rodar hasta los 62 km.

Y en casa, ducha hirviendo, caldo (¡de pita no, del sobre!) quemándome les manes y jersey de cojón oso polar pa dormir la siesta.

Otra del Guerra: una vez presentaroni a Valle Inclán, el escritor tan irreverente y extravertido; y dixoi Valle Inclán: "¡Oiga, usté ye un fenómeno, da gusto velu torear, da gusto ver les coses que haz!¡Sólo i falta morise toreando!" Y el otru quedó así como acojonau y dijo: "Se hará lo que se pueda"

La pita suicida

¡Será cabrón!

1h 40m, 33 km, max 152 avg 135, 790 kcal

Entrenamiento vespertino a la luz del candil, tarde fría y perra; como no estábamos para ir lejos, cojo elpaseo marítimo de los concejales hasta el Entrego y de ahí a Duro Felguera un par de veces. Entre ponte bien y tate quietu, salió más de hora y media.

Y ahí salió la pita suicida, en Ciañu al lao del Pompián: una pita que se me tiró a la bici, aunque en el últimu momento pensolo mejor y sólo i pegué de costao. Lástima, porque al menos hubiera salido un buen caldín. Si no puedo coger al Correcaminos, por lo menos hubiera cogido a la prima.

Cachondeo aparte, por más que lo intento haciendo aceleraciones, no logro pasar de los 20'r km/h de media; de onde no hay, no se pué sacar. Tá claro que hasta que no llegue a los 2.000 kms no voy a arrancar.