¿¿¿¿¿Qué creias, que os ibais a librar de mi????
Pues no, cabrones; que andar, no andaré un pijo en bici; pero tocar, bien que toco los cojones. Así que nada, un añu más (y que no falte) a rodar por eses caleyes, a subir, a bajar, a inflar globos y a llegar media hora tarde. Bueno, eso a pesar del tiempu tan maravillosu que tenemos, ya llevamos 600 kilómetros (y unes cuantes salides del club anulades). El sábado, el gimnasio parecía el mercao de los lunes. Pero en fin, , partiendo de la nada llegaremos a la más alta cima de la miseria, como siempre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario