- Será guarro...
A petición popular, voy a contaros cuando gané la vuelta a Palencia de Juveniles en 2005.
De aquella, me dio la ventolera de recorrer el Camino Real de Castilla, una más que curiosa obra faraónica que quería unir, hace dos siglos, Santander y Madrid. Hoy es un camino bonito para ciclar, pero decadente, abandonado...
Mapa en ristre (¿Donde estaba el GPS y todo eso hace sólo12 años?!!) y con Marina de coche de apoyo, arranqué de Sama en varias etapas: Casu, Tarna, Riaño, Osorno, Guardo...
Al pasar por Guardo vi un poco de movimiento en el centro del pueblo, pero no le dí importancia; así que seguí mas chulo que un ocho hasta Cervera de Pisuerga, en cuyo Parador habíamos reservado. Al llegar, empecé a ver carteles, Protección Civil... Así que pregunté y me dijeron que en una hora pasaba la Vuelta de Juveniles. Pero yo, silbando tangos, seguí, y pregunté a un Guardia Civil: "Oiga el Parador, por favor? Es que soy el escapado". El guardia me miró de arriba abajo y no me dio una ostia porque había testigos, que si no... Pero me contestó en el tono habitual de Clint Eastwood cuando va a desenfundar: "Tres kilómetros puerto arriba, gilipollas" (Bueno, esto útimo seguro que lo pensó).
Así que ya pensando en el tramo final, eché puerto arriba. Aún llevaba la bici de carretera y el maillot amarillo que usé hoy. Si, algunos pensaréis que es vintage, retro, rococó; otros pensaréis que menudo rata estoy hecho. El caso es que saliendo del pueblo empiezan a pasarme motos grandes; y llega la primera moto de la Benemérita: "Venga, quitese del medio de una p... vez"; pero yo, a mi bola, sigo subiendo. Fotógrafos, segunda moto de la G Civil, pero los paisanos que me veían desde arriba...¡pensaban que era el líder escapado! Y empezaron a aplaudirme. Mas motos, más Benemérita, mas aplausos, y más gente pensando que el de amarillo estaba escapado.
Cuando llega el coche de la Guardia Civil ya casi estoy arriba, pero la gente piensa que me están apoyando, y venga a aplaudir; el guardia ya estaba desenfundando, y por detrás vienen los juveniles mordiendo como lobos, y yo ya veo la pancarta del premio de montaña junto al parador, y me digo que no me van a coger,y apreto; y la G Civil apreta a mi lado; y los juveniles esprintan, y todo el mundo aplaude, que lo cogen, que no... hasta que tuerzo para el Parador, los juveniles se quedan a cuadros y el guardia empieza a comerse el tricornio por no disparar.
Y ahora el sexo. Marina había llegado un par de horas antes en coche; sube a la habitación, y al poco baja a recepción: Perdone, ¿no tendrá una habitación con una cama más grande? Es que mi compañía está por llegar". El de recepción, viendo a Marina, empieza a pensar en un jeque árabe, o en un Sean Connery, Robert Pattison, noches de pación (perdón, quise decir, de pasión) (ojo, si el Parador, que está bastante fuera de mano, hablara, iba a a contar cosas de alguno del Sporting o del Real Oviedo)... Así que imaginaros la sorpresa del acólito cuando a las dos horas llego yo vestido de Piolín con el casco en la mano preguntando: "¿Ya llegó Marina?". De las ostia que me dió, casi subo a la habitación de golpe.
¿No me creeis? Todavía hay carteles por San Glorio diciendo: "Se busca"...
😂😂😂😂😂😂😂😂😂😂
ResponderEliminarYes la hostia Manolo, nun cambies nunca.
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