Un paisano que era muy gallu empeñóse en ir a cazar gorilas a África, pero no sabía ni cómo era aquello. Así que compró too la ropa en "El Mapa" y fue pa un país de aquellos de África y fue pa la tienda del parque:
- Oye, finu, ¿cómo hacéis aquí pa cazar el gorila?
Y diz el negro de la tienda:
- Bueno, tenemos escopetes de un tiru, de dos tiros, de cinco tiros...
- Home, bueno, yo soy de Sama, con lo gallu que soy... dame la de un tiru ná mas...
Así que el gallu esty garra la escopeta, va pa la selva, y de repente, zas, encuentra a un gorila. Echa la escopeta a la cara, apunta... y falla.
Y el gorila, abriendo las manos y levantando los brazos, dice:
- Tiro fallado... cazador follado.
Así que lo coge el gorila,le baja los pantalones... Y púsolu mirando pa la Meca rápidamente. Así queel paisano, con la retaguardia hecha un jardín va pa la tienda:
- Oye, finu, dame la escopeta de dos tiros porque yo, de Sama, de Sama... Ye que yo soy más bien de subiendo pa les Pieces, hombre...
Así que el paisano vuelve pa la selva, vuelve a encontrar el gorila, echa la escopeta a la cara, apunta, dispara dos veces... Y falla los dos.
Y el gorila dice:
- Doble tiro fallado... cazador doble follado...
Y dejolu... dejolu como un bebedero de patos. Así que el finu de él vuelve pa la tienda y diz:
- Oye, verás, ye que yo soy más bien de Rondera, detrás de Les Pieces... dame la de cinco tiros, porque yo, de Sama, de Sama...
Y vuelve pa la selva, y vuelve a ver el mismo gorila, y vuelve a echar la escopeta a la cara, y dispara cinco veces... Y falla las cinco.
Y el gorila le echa el brazo sobre el hombro, baja la voz, y dice:
- Oye, dime la verdad... Tu aquí no veníes a cazar, ¿eh?...
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Esti ye la propina. Un paisano que nunca había ido de caza, pero bueno, siempre había oido hablar de ello, y picaba-y el gusanillo... Así que cuando se jubiló compró la escopeta, les botes, el arma... Y marchó pa Tarna, aunque nunca había estao por allí, ni mucho menos cazando...
Y en esto muevense unos matos y de detrás sale un oso de trescientos kilos, de pie, con muy mala ostia, y diz:
- - ¿¡Qué, cazador!?
Y el paisanín quedó así parau en seco y diz:
- ¡¡No, home no!! ¡¡Fontaneru!!
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