En el Entrego. Pa empezar, ayer estaba lleno de carruseles, no sé qué fiesta tendrán. Pero del parque hacia el museo y hacia Ciaño ha desaparecido la raya (que no se puede llamar carril bici), está medio oculta, como carcomida. Lo que nos vendieron como la solución a todos los problemas está cayendo en el olvido. Ni soluciona los problemas de los ciclistas ni de los peatones ni de los vecinos. Un pasito p'alante y dos pasitos p'atras. Esto es lo que hay, oiga.
Hicieron el carril a la puta carrera antes de las elecciones y ahora se les han caido los palos del sombrajo. Y aún se preguntan qué es lo que les salió mal el domingo. Por algo así cayó la torre de Babel. Y coño, voy a decilo, aquí en Langreo tenemos un carril-bici más o menos apañau, no la chapuza que hicieron estos por un puñado de votos.
Y lo siento, pero si no lo digo reviento.
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