Dos camioneros circulan con un gran camión a las cuatro de la mañana por una carretera del centro. Mientras uno conduce como un descosido, el otro dormita lo que puede. La radio está encendida y vomita los últimos éxitos de "El Fari".
Y de repente, por la radio sale un boletín de noticias urgente:
- ¡Esto es una emergencia de última hora! Se han avistado varios platillos volantes por la zona centro. ¡Parace que hay una invasión de OVNIs! Si se los encuentran tengan cuidado y háblenles despacio, porque podría comenzar la Tercera Guerra Mundial.
El que conduce paga un codazo a su compañero y dice:
- ¡Oye tu, mira lo que están diciendo!
El otro camionero despierta y dice:
- No me des la brasa, hombre, cómo los vamos a encontrar.
- Pues hay que tener cuidado con ello...
- ¿Pero cómo los vamos a encontrar, hombre, así, a las cuatro de la mañana?
Y de repente... un kilómetro más allá... zas, una luz intermitente dando vueltas, girando sin parar. El conductor grita:
- ¡¡Ostras, tu, los marcianos!! ¡Hay que tener cuidado!- Y pega un frenazo que casi hace volcar el camión. Así que se bajan los dos camioneros:
- Oye, mira a ver tu por ahí... Y cuidado, ¿eh?, que son peligrosos, no vayamos a empezar nosotros la guerra...
Con que empiezan a recorrer el arcén, y de repente, detrás de unos matorrales ven una forma agachada, una sombra casi inmóvil...
- ¡Ostras, tu, aquí hay uno!!
- ¡Déjame a mi, déjame a mi, que yo cuando estuve en la mili...!
- ¡¡Pero habla suave, no vayamos a empezar otra guerra mundial!!
- ¡¡Pero habla suave, no vayamos a empezar otra guerra mundial!!
- ¡ Si, hombre, ya verás, tu déjame a mi!!
Y parándose en seco empieza a gesticular y se dirige a la forma articulando cuidadosamente y señalando al camión:
- Camión... Fruta... ¡Murcia! ¡A- MI -GO... !
Y la sombra responde...
- Y yo Paco... la ambulancia... c***ndo...
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